martes, 19 de octubre de 2010

Noemi

No sé por qué. No soy de los que se fijan en las jovencitas. La verdad es que me gustan todas aunque más esas chicas de ... como decía aquella serie "treintaytantos".

Pero aquel día que estuve con ella y con Ingrid aprovechando una "promoción", me di cuenta que era diferente. Muy guapa. Muy, muy simpática. Y un cuerpo hecho para pecar.

Nos estuvimos tomando algo "después" y confirmó mis sospechas. Era encantadora. Tenía que quedar con ella "a solas".

Alguna semana después pude por fin cumplir mi sueño.

Estuvimos charlando un rato hasta que se fue a dar una ducha. Hacía frío y mientras esperaba me di cuenta que tenía los pelos de punta aunque no sé si era por el tiempo o por estar con esa preciosidad.

Tardó muy poco en regresar, cubierta sólo con una toalla y en ese momento, todo el frío desapareció. Bueno, todo no, porque tenía las manos heladas.

Pero pronto entraron en calor. Si no, me mata.

Pude abrazarla, besarla, contemplar mil veces esa cara tan linda y sobre todo, disfrutar de uno de los mejores días de mi vida.

Por jovencita que sea, es de esas chicas que te gustaría tener siempre cerca. Muy cerca.